Dentro de la producción de espectáculos teatrales, La Manada define sus líneas de trabajo desde tres ángulos y campos de interés:
La Manada pretende, como principal objetivo artístico, explorar las complejidades del ser humano dentro del contexto de una vida moderna en permanente movimiento, provocando reflexiones sobre el mundo que nos rodea y que nos ha hecho como somos, involucrando al espectador a través de medios escénicos atractivos y contundentes. Todo ello desde una voluntad crítica insobornable, desde una mirada poética radical, teniendo como medio un lenguaje escénico plural y actual, divertido y emocionante, que establezca un diálogo cómplice y crítico con el espectador, desde un compromiso directo y sin concesiones.
Como compañía, creemos en el trabajo artístico colectivo, creando y manteniendo un equipo humano que comparte experiencias, técnicas y aptitudes artísticas, y una misma implicación en el proceso creativo. Así, a través del desarrollo de un lenguaje común y propio, conectado con la realidad que nos envuelve, tenemos como finalidad estimular a nuestros contemporáneos, generando actitudes críticas y positivas, de enriquecimiento cultural y emocional.